Personal

DICEN…

Dicen que no debo darte ya el pecho porque no te alimenta, que no sirve de nada, que estás enviciada y que solo haces tirar de mí.

Dicen que debería haberte pasado a tu cama hace tiempo, que podemos aplastarte, que nunca querrás dormir sola, que te hemos mal acostumbrado y que papá y yo no tenemos intimidad por tu culpa.

Dicen que no deberíamos pedirte perdón cuando nos equivocamos, que nos quita autoridad, que así no conseguiremos que obedezcas nunca.

Dicen que no debería cogerte en brazos cuando lloras, que me manipulas y siempre vas a conseguir lo que quieras y que te consiento demasiado.

Dicen que no debería escucharte ni pararme tanto a explicarte las cosas. Que todavía no entiendes y que soy tu madre y las cosas hay que hacerlas como yo diga. Dicen que no puedo permitir que me torees y que elijas por ti misma.

Dicen que debería llevarte a la guardería, que allí te sociabilizarás y que si no, irás atrasada cuando entres en el cole. Dicen que así tendré más tiempo para mí.

 

Cuando crezcas, mi vida, te darás cuenta de que todos se creen con derecho a decirte cómo tienes que vivir tu vida y que cuanto más feliz eres más intentan hacerte dudar. Sé fuerte mi niña. No dejes que te corten las alas y que hagan de ti lo que no quieres ser.

Vive tu vida como quieras vivirla y tu maternidad como te pida el corazón. Infórmate, no te creas todo lo que te dicen (y con más motivo si tu decisión implica que alguien gane dinero) y sé plenamente consciente de cada paso que estás dando.

Recuerda lo vivido porque te dará fuerzas y te hará sentirte segura de ti misma. Recuerda que te amamos sobre todas las cosas y que, aunque nos equivocamos mucha veces, siempre intentamos tomar el mejor camino pensando en ti y en tu bienestar.

Recuerda que no todo vale, cariño. Recuerda que siempre estuvimos a tu lado, consolando tu llanto, secando tus lágrimas, escuchándote. Recuérdate importante, necesaria, única, insustituible. Recuerda nuestros besos inmensos, nuestros tiernos abrazos, nuestras caricias mientras estabas cómodamente sentada en el sofá viendo los dibus, nuestras excursiones, nuestras carcajadas y nuestras cosquillas. Recuérdate feliz, pequeña pero grande a la vez. Recuerda cómo es sentirse parte de una familia, sentir que tus palabras son escuchadas y no se las lleva el viento.

No cambiaríamos ni un solo segundo de nuestra vida contigo, ni uno solo. Porque tú eres lo mejor que nos ha pasado y ahora todo parte de ti.

Recúerdanos unidos, fuertes, eternos. Y recuerda también que, pase lo que pase, mamá y papá siempre estarán contigo.

 

Total de visitas Visitas hoy

2 Comments

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

4 × tres =

A %d blogueros les gusta esto: